En Cuernavaca todos los espacios exteriores se aprecian y viven. Casa Quieta 5 aprovecha la restricción impuesta por el reglamento para generar un patio lateral a la casa delimitado por un gran muro de piedra. Los espacios interiores de planta baja se vuelven exteriores al desaparecer los canceles en muros color tierra generando así una proximidad con la vegetación, desvaneciendo la arquitectura en la naturaleza y creando una integración total de terrazas, interiores y patio.
Sobre este basamento de cartelas pétreo descansa un volumen regular blanco que resuelve todas las recámaras con pequeñas terrazas.
Proyecto: tescala
Etapa: Construída
